La terapia una vez prometedora que infunde plasma sanguíneo de pacientes con covid-19 recuperados en personas recién infectadas, teóricamente para aumentar la inmunidad, ha sufrido reveses. Pero algunos defensores dicen que es demasiado pronto para abandonar el tratamiento.

El alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, dice que muchas muertes por pandemia podrían haberse evitado en California si el estado se hubiera centrado antes en vacunar a las personas en los vecindarios más desfavorecidos.

La relación de bajo rendimiento de Estados Unidos con India nunca ha parecido más importante

¿Vidas o medios de subsistencia? Una lección del estado de Mount Rushmore